Seguro que a todos nos suena, de una manera u otra, ésta preparación. Todos hemos crecido con ésta receta en la mesa, en las tierras británicas y fuera de sus fronteras.
Y es que el pastel de carne inglés, o cottage pie es una de las preparaciones clásicas más socorridas, ya que se puede preparar de cero, o aprovechando cualquier tipo de carne que nos haya sobrado de otros guisos. Es decir, que para las madres es una magnífica manera de servir un nuevo plato camuflando la comida preparada anteriormente.
Sólo necesitamos un cremoso puré de patata y la sabrosa salsa boloñesa, y con eso ya pinta muy muy bien. Para mi, como último toque, un poquito de pan rallado y queso, para darle ese toque gratinado que me obsesiona.
¡Espero que os guste!
Con ésta receta participo en el último:
El Reto #Asaltablogs es una divertida manera de conocer blogs ajenos, y tras urgar por todas sus recetas, cocinar una de ellas dándole nuestra propia versión.
Aunque fué lo que os dije el mes pasado, éste sí que sí es el último reto del "curso". Con este asalto invisible nos despedimos hasta septiembre... Pero ésta vez de verdad de la buena, es que nos gusta más un robo que a un tonto un lápiz.
La receta que traigo hoy fue un flechazo a primera vista al pasear por el recetario de María de In my little kitchen. Yo, que soy la loca de las cremas y purés, no he podido negarme a la tentación de su Pastel de carne.
(2 pax)
INGREDIENTES:
- 350 g de Puré de patata casero
- 200 g de salsa boloñesa
- C/s de pan rallado
- C/s de queso rallado
- Especias y hierbas aromáticas: C/s de nuez moscada.
Primeramente hacemos nuestro puré de patata (Receta vinculada en el listado de los ingredientes).
En ésta ocasión buscamos que nos quede un puré muy fino, sin grumos, por lo que lo pasamos por un pasapurés, e incorporamos con ayuda de unas varillas de cocina.
Podemos hacer unas hendiduras con ayuda de un tenedor y meterlo al horno para que se dore, pero yo he preferido crear una costra crujiente, espolvoreando un poco de pan rallado por encima.
Y sobre éste, un puñado de nuestro queso rallado favorito.
Metemos en el horno precalentado a 200ºC con la función grill.
Pasado el tiempo, sacamos del horno y llevamos a la mesa para tomarlo bien caliente.
Así se ve la costra crujiente.
Éste es el resultado final de nuestro pastel de carne.
¡Qué aproveche!
Si te gusta esta o cualquiera de mis recetas y la preparas, sube una foto mencionándome en cualquiera de mis redes sociales o bajo el hastagh #AndreítaComeDeTodo para así poder ver lo bien que te ha quedado 😊
Horneamos durante 10 minutos.
Y así es su interior al fraccionarlo.
Que maravilla de pastel! Te ha quedado estupendo! Un beso!
ResponderEliminarEs una receta divina que hace maravillas con todas las sobras que tengamos en casa. Muchas gracias!!! Un besote
EliminarTe ha quedado genial! En casa a los peques y también a los mayores nos encanta. Besos
ResponderEliminarMuchas gracias!!! Es que está tan buenooooo!!! Besos
EliminarMenuda pinta tiene Andrea, la verdad es que es un plato que es delicioso y que no es nada dificil de hacer. Me alegro mucho que os haya gustado.
ResponderEliminarUn beso enorme y gracias por asaltarme
Gracias a ti!!! Un placer pasar por tu cocina!
EliminarSi, es muy sencillito y queda super resultón, me encanta! Un besote
Que riiicoooo!! Y me encanta como te ha quedado el corte. Buen robo!
ResponderEliminarPara mi también es lo más espectacular de la receta! Muchas gracias! Un besote
EliminarLos pasteles de carne son de lo más socorridoo y te ha quedado genial!
ResponderEliminarun besito
Siii! Muchas gracias, un beso
EliminarQue buenísima pinta tiene umm un plato super bueno.
ResponderEliminarbuen asalto
bess
jijiji muchísimas gracias, me alegro que te guste
EliminarUn beso