Galletas de queso
Siempre que hablamos de hacer galletas pensamos en las hechas de vainilla, de chocolate o de distintos frutos secos, rellenas o no, pero siempre dulces para comer en desayunos y meriendas.
Y no siempre tienen porqué ser así. Las galletas saladas también son una gran opción.
De hecho, como os decía en la receta de los Snackers, éste tipo de galletas aparte de ser un gran tentempié, son brutales como acompañamiento.
Hacer galletas en casa siempre es una gran motivación, quedan muy resultonas en un tiempo mínimo de preparación, cualquiera puede hacerlas.
Éstas en especial son incríblemente buenas, el sabor del queso queda súper intenso, crujientes y sabrosas.
Y puedes como siempre, adaptarlas a tus gustos, darle ese toque que tanto te gusta con especias, escamas de sal, sésamo, pipas... Un sinfín de posibilidades.
¡Espero que os guste!
En un cazo al fuego bajo, derretimos la mantequilla, dándole vueltas para evitar que humee.
Agregamos el queso que hayamos escogido cortado en trocitos muy finos, que ayudará a que se derritan más fácil y rápidamente.
Mientras el queso comienza a fundirse, en un plato agregamos el resto de los ingredientes que vamos a necesitar: La harina, el pimentón, la sal, y el orégano.
Con ayuda de unas varillas de cocina, removemos hasta que el queso esté completamente fundido e integrado con la mantequilla.
Incorporamos el contenido del plato de golpe.
Apartamos del fuego y comenzamos a mezclar.
Hasta que sea homogéneo.
Formamos una bola, enfilmamos y dejamos reposar en la nevera durante 15 minutos.
Pasado el tiempo, estiramos la masa hasta darle un grosor adecuado, de unos 5 mm aproximadamente.
Con ayuda de un cortapastas, damos la forma deseada a las galletas.
Disponemos en una fuente de horno con papel de cocina, colocadas de manera ordenada.
Con ayuda de un sello, pinchamos la superficie de las galletas.
De esta manera se forma un dibujo que queda más vistoso en la superficie de las galletas, pero este paso se puede obviar.
Metemos al horno precalentado a 180ºC.
Pasados de 8 a 10 minutos, nuestras galletas estarán listas.
Dejamos enfríar sobre una rejilla.
Servimos.
Yo en éste caso las he utilizado a modo de dips para disfrutar de un Hummus casero.
Éste es el resultado de nuestras galletas de queso.
¡Qué aproveche!
Si te gusta ésta o cualquiera de mis recetas y la preparas, sube una foto mencionándome en cualquiera de mis redes sociales o bajo el hastagh #AndreítaComeDeTodo para poder ver lo bien que te ha quedado 😊.
Y no siempre tienen porqué ser así. Las galletas saladas también son una gran opción.
De hecho, como os decía en la receta de los Snackers, éste tipo de galletas aparte de ser un gran tentempié, son brutales como acompañamiento.
Hacer galletas en casa siempre es una gran motivación, quedan muy resultonas en un tiempo mínimo de preparación, cualquiera puede hacerlas.
Éstas en especial son incríblemente buenas, el sabor del queso queda súper intenso, crujientes y sabrosas.
Y puedes como siempre, adaptarlas a tus gustos, darle ese toque que tanto te gusta con especias, escamas de sal, sésamo, pipas... Un sinfín de posibilidades.
¡Espero que os guste!
Mi receta para un nuevo:
El Reto #Asaltablogs es una divertida manera de conocer blogs ajenos, y tras urgar por todas sus recetas, cocinar una de ellas dándole nuestra propia versión.
Después de unas cuantas vueltas al recetario de Blanca del blog Menjar a ca la Blanca me animé a preparar estos "saladitos" a los que me he vuelto adicta: Galletas de queso.
(15 Uds)
INGREDIENTES:
- 70 g de harina de trigo
- 43 g de mantequilla
- 60 g de queso gruyère
- C/s de orégano
- 1/2 Cdita de pimentón dulce
- C/s de sal
- 43 g de mantequilla
- 60 g de queso gruyère
- C/s de orégano
- 1/2 Cdita de pimentón dulce
- C/s de sal
PREPARACIÓN:
En un cazo al fuego bajo, derretimos la mantequilla, dándole vueltas para evitar que humee.
Escogemos un queso que sea muy sencillo de derretir, como puede ser la mozzarella, queso cheddar, gorgonzola o el queso gruyère que es el que yo he utilizado.
Mientras el queso comienza a fundirse, en un plato agregamos el resto de los ingredientes que vamos a necesitar: La harina, el pimentón, la sal, y el orégano.
Con ayuda de unas varillas de cocina, removemos hasta que el queso esté completamente fundido e integrado con la mantequilla.
Incorporamos el contenido del plato de golpe.
Apartamos del fuego y comenzamos a mezclar.
Hasta que sea homogéneo.
Formamos una bola, enfilmamos y dejamos reposar en la nevera durante 15 minutos.
Pasado el tiempo, estiramos la masa hasta darle un grosor adecuado, de unos 5 mm aproximadamente.
Con ayuda de un cortapastas, damos la forma deseada a las galletas.
Disponemos en una fuente de horno con papel de cocina, colocadas de manera ordenada.
Con ayuda de un sello, pinchamos la superficie de las galletas.
De esta manera se forma un dibujo que queda más vistoso en la superficie de las galletas, pero este paso se puede obviar.
Metemos al horno precalentado a 180ºC.
Pasados de 8 a 10 minutos, nuestras galletas estarán listas.
Dejamos enfríar sobre una rejilla.
Servimos.
Yo en éste caso las he utilizado a modo de dips para disfrutar de un Hummus casero.
¡Qué aproveche!
50 Comentarios:
Publicar un comentario
¿Quieres preguntarme algo o dejarme algún comentario? ¡Éste es el lugar!
¿Tienes alguna duda, consulta o sugerencia? Puedes hacerlo en cualquiera de mis redes sociales: google+, facebook y twitter.
Me encantará leerte, y te responderé lo antes posible.
Muchas gracias por visitarme! :)