En mi casa hay pocas cosas tan típicas en verano como los sorbetes de frutas caseros, los cortes de helado "de duro", y las tartas heladas.
La verdad es que nunca me había dispuesto a preparar alguna.
¡Espero que os guste!
Una receta para:
En el reto Desafío en la cocina, se nos da un ingrediente o una receta y nosotros tenemos que hacer nuestra propia versión intercalando platos dulces y salados.
Con toda la situación que estamos viviendo, debido al estado de alarma, a la crisis sanitaria por el coronavirus y al confinamiento, llevamos ya un par de meses en los que no hemos publicado nuestras recetas... Además en el grupo tenemos varios sanitarios como nuestra querida boss MLuz del blog Trasteando en mi cocina y trabajadores de primera necesidad que llevan (llevamos) todo este tiempo al pie del cañón, más que nunca. 💪
Pero Mayo es un mes especial, y es que es el cumpleaños del desafío, al que yo tengo especial cariño por la gente que lo forma, y porque fue el primer reto en el que participé al poco de crear el blog y desde entonces me "han visto crecer".
Vamos a soplar las velas en todas y cada una de las tartas que hemos hecho para el recopilatorio: Desafío en la cocina: Tartas heladas.
(2 pax)
INGREDIENTES:
- 160 ml de nata 35% mg
- 1 Clara de huevo
- 45 g de azúcar blanquilla
- 90 g de cobertura de chocolate
- C/s de esencia de vainilla
PREPARACIÓN:
En el robot de cocina disponemos la clara de huevo.
Batimos hasta que empiecen a espumar, entonces, agregamos la mitad de la cantidad total del azúcar.
Continuamos batiendo durante unos minutos más, hasta que esté completamente montado.
Reservamos en un bol aparte.
De igual manera, montamos la nata, agregándole el azúcar cuando esté a medio montar.
Acabamos de montar hasta que esté bien firme.
Entonces, en un bol aparte, agregamos de nuevo el merengue junto con la nata y la esencia de vainilla, y mezclamos con movimientos envolventes.
Refrigeramos hasta su uso.
Mientras tanto templamos el chocolate y pintamos unas tiras de acetato del tamaño proporcional al molde que vayamos a usar. (Perdón por que se me olvidó la foto)
Dejamos una capa muy fina, y metemos en la nevera, para que enfríe y solidifique, que será casi instantáneo. Hacemos tantas láminas como vayamos a usar. En mi caso, con 6 será necesario. Guardamos el chocolate sobrante.
Entonces, en un molde plum cake, cubierto con papel film, vertemos un poco de la mezcla.
Vamos despegando las capas de chocolate del acetato, con cuidado de no romperlas, y la s disponemos sobre la capa de merengue y nata.
Cubrimos de nuevo con otra capa de merengue y nata, y continuamos así hasta el final, intercalando las láminas de chocolate con el relleno, como si estuviéramos haciendo una lasaña.
Una vez que hemos llegado al final, cubrimos con el papel film, para sellarlo de alguna manera, y llevamos al congelador, durante al menos 12 horas.
Pasado el tiempo, desenvolvemos.
Con el resto de la cobertura de chocolate que habíamos guardado, la templamos y esparcimos por encima de la tarta helada a modo de decoración, con ayuda de algún utensilio.
El chocolate se solidificará instantáneamente.
Éste es el resultado final de nuestra tarta comtessa.
Con ayuda de un cuchillo cortamos y servimos.
Éste es el aspecto de la tarta en su interior.
Todo un clásico en nuestra mesa, hecho con nuestras propias manos.
¡Qué aproveche!
Si te gusta esta o cualquiera de mis recetas y la preparas, sube una foto mencionándome en cualquiera de mis redes sociales o bajo el hastagh #AndreítaComeDeTodo para así poder ver lo bien que te ha quedado 😊
Tengo que hacer la comtesa, me encanta y nunca la he hecho!!! Besos
ResponderEliminarPues tarta helada más sencilla no la hay!!! Un beso
EliminarQue deliciosa tarta!!!
ResponderEliminarBesitos
Rosa
Siiiii! Nos encantó! Muchas gracias
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