Os aseguro que esta fideuá hecha en base a tres ingredientes, no necesita nada más para ser una bomba de sabor.
Hay días que nos apetece liarnos la manta a la cabeza y mezclar en un mismo plato cinco o seis ingredientes a sabiendas de que pueden encajar bien, y en otras ocasiones, preferimos ser más escuetos y con un par de cosas marcarnos un señor platazo, y no pasa nada, está bien mientras el resultado sea rico y a ti te guste.
Últimamente nos ponemos muy tiquismiquis con prácticamente todo, y aunque me caigan chuzos de punta, soy de las que pienso que aunque las mejores tortillas son las que llevan cebolla y están a medio hacer, las que son sin, y pasaditas, también están buenas.
Creo que las conservas son un método ideal para introducir en nuestras cocinas distintos ingredientes y que consumir ingredientes congelados no es sinónimo de mala calidad.
También opino que hay más paellas que la valenciana, y que esta no es sólo la original con conejo, garrofó y caracoles... Ya que de hecho la mayoría de la población no la hemos probado así, y cuando la hacemos en casa adaptándola a nuestros gustos (de una manera razonable, no como la paella de Gordon Ramsay) puede seguir llamándose paella en vez de arroz con cosas.
En esta vida hay hueco para todos, señores.
No seamos tan cuadriculados ni pongamos el grito en el cielo cada vez que alguien haga las cosas u opine distinto a nosotros mismos.
Con ésta receta participo de nuevo en:
En el reto tus recetas, dónde hacemos un plato usando como norma principal, un ingrediente elegido a votación que haya pasado por un proceso de elaboración y envasado, tal y como ocurre con las verduras en conserva, que tras la recepción y selección de la mejor materia prima, se lava, clasifica, envasa y cubre con el líquido de cobertura o salmuera para después proceder a la precocción o calentamiento de los tarros durante un tiempo y temperatura determinados, con lo cual también quedan esterilizados antes de pasar a la cadena de impresión y empaquetado.
En el reto tus recetas, dónde hacemos un plato usando como norma principal, un ingrediente elegido a votación que haya pasado por un proceso de elaboración y envasado, tal y como ocurre con las verduras en conserva, que tras la recepción y selección de la mejor materia prima, se lava, clasifica, envasa y cubre con el líquido de cobertura o salmuera para después proceder a la precocción o calentamiento de los tarros durante un tiempo y temperatura determinados, con lo cual también quedan esterilizados antes de pasar a la cadena de impresión y empaquetado.
Yo he elegido unas alcachofas braseadas ya que para mi es uno de los ingredientes que prácticamente siempre consumo en conserva, evitándome así el paso de la limpieza y cocción.
Una fideuá con un sabor impactante. Éste es el resultado final de nuestra fideuá con salsa americana.
Podéis ver el resto de recetas con seguro que una buena diversidad de ingredientes en Reto Tus Recetas: Verduras en conserva.
INGREDIENTES:
Para la salsa americana:
- Cabezas y cáscaras de 12 gambones
- 80 g de cebolla
- 40 g de puerro
- 40 g de pimiento rojo
- 1 Zanahoria
- 20 g de harina
- 1 Cda de pimentón picante
- 100 g de tomate triturado
- 100 ml de brandy
- 200 ml de agua
- AOVE
- Sal
- Especias y hierbas aromáticas: Pimienta negra al gusto, 2 cayenas
Para la fideuá:
- 500 ml de salsa americana
- 12 Gambones pelados
- 12 Alcachofas braseadas Ibsa
- 100 ml de agua
- 200 g de fideuá hueca
- AOVE
Para la salsa americana:
- Calentamos un chorro de AOVE y sofreímos en él las cabezas y carcasas de los gambones durante 5 minutos aproximadamente, prensando un poco las cabezas para sacar todos los jugos en caso de hacerlo a máquina. Con la thermomix, pasado el tiempo, damos unos golpes para triturar.
- Añadimos las verduras y sofreímos el conjunto durante otros 5 minutos más.
- Añadimos el pimentón que le dará color a la salsa. Rompemos el hervor añadiendo el brandy (Que se puede flambear en caso de hacerse en cazuela normal) y el agua. Incorporamos la harina e incorporamos bien sin parar de remover. Añadimos también el tomate frito y cocinamos a fuego medio durante 5 minutos más.
- Trituramos el conjunto y lo colamos antes de pasar a embotar.
Para la fideuá:
- Calentamos la salsa americana para su uso.
- En una paellera con un chorro de AOVE, doramos los fideos de fideuá. Rompemos el hervor agregando la salsa americana y el agua necesaria para cocer nuestros fideos.
- Cocinamos a fuego medio bajo durante aproximadamente 9 minutos, hasta que la fideuá chupe todo el caldo.
- Disponemos los gambones y las alcachofas braseadas por encima, cubrimos con un paño limpio y dejamos reposar 5 minutos antes de comerla, para que repose y los gambones se cocinen con el calor residual.
NOTAS:
- Para hacer la fideuá, la fórmula del agua es de dos a uno, por lo tanto para la cantidad de fideúa que uses, necesitarás el doble de líquido.
Madre del amor hermoso, mas perfecta imposible, la próxima vez dame un toque que te ayudo a comerla para que no quede nada sin ningún problema... mmmmm.Felicidades por la receta.
ResponderEliminarBesos.
Andrea una receta espectacular, como me gusta, tiene una pinta tan rica!!! Felicidades. Besos
ResponderEliminarBuenisimo plato y la salsa fabulosa.Enhorabuena.
ResponderEliminarAndrea una receta de lujo
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