Yo tengo la teoría de que una vez llegada la primera lluvia de Septiembre, se acabo el verano. Y aunque muchos os echéis las manos a la cabeza, yo me alegro por eso.
Y precisamente esta época en la que los días siguen siendo largos, pero las temperaturas ya están calmadas, los días con nubes y ya se palpa la rutina, son mis favoritos. Además es el momento perfecto para ponerse en modo hibernación y preparar un montón de conservas con los frutos de la huerta que ahora está al 100% de producción.
Recetas de aprovechamiento, como cada otoño. Conservas de pepinillos en salmuera, tomate frito, tomates cherry enteros, pimientos asados, compota de manzana y también de pera, mermeladas de todo tipo de frutos y también purés de calabaza, o de calabacín como es el caso.
Yo preparo un montón de esta crema deliciosa sin patata, para que quede perfecta pasado el tiempo y la congelo en bolsas al vacío y así aprovecho toda esa hortaliza que nos surten y no podemos desaprovechar.
¡Espero que os guste!
INGREDIENTES:
- 1 Puerro
- 1 Calabacín
- 400 ml de caldo de pollo
- 20 g de queso semicurado rallado
- AOVE
- Sal y pimienta
- En un cazo calentamos un chorro de AOVE, agregamos el puerro y doramos. Agregamos el calabacín y cocinamos unos minutos hasta que tome color.
- Salpimentamos al gusto e incorporamos el caldo de pollo. Cocemos durante 20 minutos aproximadamente, hasta que las verduras estén tiernas.
- Agregamos el queso rallado, y vertemos en el robot de cocina, trituramos a máxima potencia
- Servimos caliente en un bol y acompañamos con los toppings que más nos gusten.
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