Estamos en plenas fiestas de San Juan y San Pedro en León, con unas temperaturas excesivamente buenas lo que nos lleva a que la ciudad esté abarrotada de gente con ganas de disfrutar de las muchas actividades que hay programadas para éstos días.
Y además, como sabéis este año somos capital gastronómica, por lo que los restaurantes, bares y confiterías pondrán aún más empeño si cabe, en que los clientes se vayan satisfechos habiendo probado una de las ciudades donde mejor se come en España, que no lo digo yo, que lo dicen aquí.
El mes de Junio ha sido el mes de los manjares dulces, de las confiterías y pastelerías.
30 días para rendir homenaje al mimo que ponen los leoneses en sus creaciones reposteras. Y es que aquí sabemos bien como finalizar una comida placentera y felizmente.
Uniendo la afamada repostería típica como las mantecadas y hojaldres de Astorga, los Nicanores y la tarta de truchas de Boñar, los lazos de San Guillermo de Cistierna, los imperiales y las yemas de La Bañeza, los amarguillos de Sahagún... con la repostería monacal, las mieles, el chocolate y muchos dulces tales como las Rosquillas de San Froilán o las canelas.
Estas son un dulce típico de León, que se hacen a demanda en todas las confiterías de la ciudad.
Un pastel con un sabor delicioso y textura crujiente por fuera ya que está elaborado con una masa de hojaldre frito, y delicado por dentro gracias a la suave crema interior, que se cubre con azúcar glass y canela.
Seguro que se os ha hecho la boca agua, no es para menos.
¡Espero que os guste!
(2 uds)
INGREDIENTES:
- 1/4 de masa de hojaldre
- Crema diplomática
- Azúcar glass
- Canela molida
- 1/2 Litro de aceite de girasol para la fritura
PREPARACIÓN:
Primeramente hacemos la crema diplomática, al igual que la hicimos para la Tarta decorada: Tendencia 2018. En éste caso como sólo vamos a hacer dos canelas, haremos la receta empleando 1/4 de la cantidad de cada ingrediente. Una vez la tengamos hecha, refrigeramos hasta su uso.
Conseguimos hojaldre. Lo mejor sería hacerlo en casa, o acercarnos a alguna confitería dónde nos puedan vender uno de calidad.
Cortamos la masa en dos rectángulos, de 5 x 13 cm aproximadamente.
Ponemos el aceite de girasol en una sartén, que sea el suficiente para que la masa flote en él.
Calentamos el aceite y cuando esté bien caliente sin que llegue a humear, agregamos las porciones de masa.
Inmediatamente las echemos en la sartén se insuflarán , al calentarse las láminas de grasa del hojaldre, dejando la parte interior hueca, prácticamente.
Dejamos que se doren por ese lado.
Y le damos la vuelta para que se haga también por el otro.
Una vez hayan adquirido un tono dorado, retiramos del fuego con ayuda de una espátila escurridora, ya que soltará mucho aceite de su interior.
Pasamos a un plato con papel de cocina absorbente para que chupe los restos de aceite.
Dejamos enfríar por completo.
Entonces, abrimos a la mitad horizontalmente con un cuchillo de sierra, hasta obtener de una pieza dos partes iguales de hojaldre: Una será la base y otra la tapa.
Si queréis podéis espolvorear un poquito de canela molida en la parte de la base.
Rellenamos con la crema diplomática que habíamos hecho con anterioridad.
Tampamos con la otra parte del hojaldre frito, sin aplastarlo sobre la crema, ya que podría resquebrajarse.
Espolvoreamos azúcar glass tamizándolo.
Y por último, echamos la canela en polvo, al gusto.
Servimos en el plato de presentación.
Y ya podemos degustar.
Éste es el resultado de este exquisito dulce leonés.
¡Qué aproveche!
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Bon dia : primero felicitarte,en principio me ha encantado tu apartado " Sobre Mi"; acabo de conocer tu página; cuando puedas si no te es mucha molestia( no tengo ni idea de postres)me podrías indicar como elaborar masa de hojaldre y la crema para hacer las Canelas de León
ResponderEliminarMoltes gracies. muchas gracias.