La princesa de la familia cumplía 3 añitos, y como viene siendo costumbre, yo me encargue de la tarta.
Tuve mis dudas sobre de qué la iba a hacer, pero precisamente unos días antes, cuando nos habíamos visto con mis primos habíamos estado hablando de las nuevas berlinas rellenas sabor pantera rosa que han salido al mercado. Ellos aún no lo habían probado por que el pastelito les resulta demasiado empalagoso, y nosotros le animamos a que lo compraran ya que a pesar de que seguía resultando muy dulce el sabor era más potente y nos habían encantado.
Así que ojeando mi Pinterest, vi la receta de éste pastel, hecho en versión tarta y ¿Qué queréis que os diga? Se me fueron los ojos.
Mi ahijadita que es súper coqueta, se enteró la misma mañana de la fiesta que yo había sido quién la había hecho, y al saber que era de su color favorito, el "tosa" entró en un estado absoluto de felicidad, jaja. Y tras una tarde con sus amiguitos desenvolviendo regalos y sin parar de jugar, al sacar la tarta, no pudo contener el grito y llevarse las manos a la boca en señal de sorpresa total! Decir que es adorable se le queda corto! (Un babero, por favor!)
La tarta gustó mucho, a niños y a mayores, (E incluso a los que el pastelito no les hacía gracia) tanto que finalmente sólo quedó una pequeña porción, la de la vergüenza.
Yo creo que es una de las mejores tartas que he hecho hasta ahora, y no sólo por su presentación, que a la vista está, entra por los ojos... Es que estaba buenísima, con todo el sabor del pastel pero sin llegar a ser pesado, súper esponjosa y rica. Seguro que la haré en más ocasiones.
¡Espero que os guste!
(15 porciones)
INGREDIENTES:
Bizcocho:
- 2 Huevos
- 400 g de azúcar
- 240 ml leche entera
- 200 ml de aceite de girasol
- 1 Sobre de levadura química
- 420 g de harina
- 1 Cdita de esencia de vainilla
- 1 Cdita de esencia de naranja
Almíbar:
- 100 g de azúcar
- 100 ml de agua
Relleno:
- 150 g de queso de untar
- 80 g de azúcar glass
- 180 ml de nata
- 1 Cdita de esencia de vainilla
- 1 Cdita de esencia de naranja
Cobertura:
- 200 ml de nata
- 500 g de chocolate blanco
- 40 g de mantequilla
- C/s de colorante rojo
Decoración:
- 3 Panteras rosas
- 30 g de chocolate blanco
PREPARACIÓN:
Para el bizcocho:
Para hacer el bizcocho usé un molde desmontable de 22 cm de diámetro, y como la masa del bizcocho iba a quedar compacta, utilicé un poco de gel desmoldable para que éste no se pegue a las paredes del molde y coloqué un papel sulfurizado en la base para que no se pegara.
Primeramente, en el bol del robot, disponemos los dos huevos con el azúcar.
Con la varilla de batir, blanqueamos a velocidad alta hasta que doble su volumen.
Agregamos el aceite de girasol.
Después agregamos la leche.
Ahora la cucharadita de esencia de vainilla.
Por último agregamos la esencia de naranja.
A velocidad media, mezclamos todos los ingredientes.
En un bol aparte, mezclamos los sólidos, la harina tamizada junto con la levadura.
Lo agregamos a la mezcla de los líquidos poco a poco, y mezclamos a velocidad media durante unos minutos.
Hasta que la masa sea homogénea.
Vertemos la masa en el molde previamente engrasado.
Y metemos en el horno precalentado a 180ºC durante 1 hora aproximadamente.
(Como yo he doblado los ingredientes, es mucha cantidad de masa para un sólo molde, por lo que de haber hecho la receta real, con 40 minutos de horneado habría bastado, pero de ésta manera, hasta la hora, el palillo de observación no salía limpio. Si queréis podéis hacerlo directamente en dos moldes.)
Si el bizcocho comienza a dorarse excesivamente por arriba, podéis colocar un trozo de papel sulfurizado por encima, de esa manera seguirá cocinándose pero no se torrará.
Pasado el tiempo, sacamos el bizcocho del horno, y dejamos enfríar en el molde.
Una vez que el bizcocho esté frío, desmoldamos (Perfectamente gracias al gel y el papel vegetal de la base) y le quitamos la parte abombada de arriba, dejándolo plano.
Para el relleno:
Mezclamos el queso con el azúcar glass.
Aparte el el robot, montamos la nata que estará bien fría.
Agregamos a la mezcla de azúcar y queso las esencias de naranja y vainilla y mezclamos
Con ayuda de una lengua de cocina, con movimientos envolventes para no bajar la nata, mezclamos los dos componentes.
Para el almíbar:
Mezclamos en un cazo al fuego los dos ingredientes y cocinamos hasta que el azúcar se disuelva.
Partimos el bizcocho con una lira o con un cuchillo de sierra hasta dar dos placas de igual tamaño de bizcocho.
Con ayuda de un pincel de cocina, humedecemos la parte de arriba del bizcocho con el almíbar.
Haremos una ganache de chocolate.
Disponemos la nata al fuego, calentándolo hasta que esté al borde de la ebullición.
Entonces, lo sacamos del fuego y agregamos de golpe todo el chocolate cortado en onzas.
Con ayuda de unas varillas mezclamos hasta que esté derretido.
Entonces agregamos la mantequilla que le aportará elasticidad y brillo.
Por último añadimos el colorante rojo, agregandolo poco a poco hasta obtener el color justo de la pantera rosa.
Mezclamos para que el color se integre en toda la mezcla.
Y dejamos que temple un poco hasta verterlo sobre la tarta por que aún estará caliente.
Entonces pasados unos minutos, sacamos de la nevera la tarta que habrá endurecido, y la colocaremos sobre una rejilla con altura en la bandeja del horno.
Vertemos sobre ella la cobertura del chocolate, tirándola desde el centro para que caiga hacia los lados.
Dejamos que la cobertura de chocolate se escurra hasta que ya no caiga nada.
Entonces metemos la tarta a la nevera durante 30 minutos para que la capa endurezca.
Recogemos el chocolate sobrante que cae tras el baño y lo disponemos de nuevo en el cazo para recalentarlo y utilizarlo tantas veces como nos sea posible.
Pasado el tiempo, sacamos la tarta de la nevera y volvemos a calentar el chocolate y a tirarlo desde el centro de la tarta para que caiga y cubra toda la superficie incluidos los laterales.
Volvemos a meter a la nevera la tarta, y repetimos este proceso tantas veces como no sea posible hasta que se acabe la cobertura de chocolate.
Yo en mi caso he dado 6 capas de cobertura.
Por último metemos la tarta en la nevera y la dejamos durante 12 horas.
Con cuidado retiramos el exceso de chocolate qué puede haber en la rejilla, y con ayuda de un par de espátulas de pastelería vamos despegando la tarta con cuidado de no desmigajarla.
Preparamos el plato de presentación colocando una blonda para que quede más vistoso.
Movemos la tarta y la colocamos en el centro de la blonda.
Para la decoración:
Utilizaremos tres pasteles pantera rosa.
Derretimos al baño maría el chocolate blanco.
Yo he decidido ponerlo así ya que en el medio ira un topper, pero podréis adornarlo a vuestro gusto.
Por último clavo el topper en el centro de la tarta haciendo que los palos toquen el plato de presentación, de esta manera quedará firme.
Así se veía la tarta en su corte.
Y ésta es la porción que nos tocó. Aquí se puede observar las distintas texturas que tienen los bizcochos, el de la pantera rosa casera más esponjoso y relleno, y el de compra.
Una auténtica delicia, que aunque está mal que yo lo diga es la versión mejorada del pastel comercial y que a todos nos encantó.
¡Qué aproveche!
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Este es el resultado final de nuestra tarta Pantera Rosa.
Así se veía la tarta en su corte.
Y ésta es la porción que nos tocó. Aquí se puede observar las distintas texturas que tienen los bizcochos, el de la pantera rosa casera más esponjoso y relleno, y el de compra.
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Qué ricaaaaaa!!!, El postre preferido de mi cónyuge!!!, ja,ja,ja...si la ve..... Besines!!!
ResponderEliminarSi la ve no me deja ni las migas, porque mira que está buena!!! Besos
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