Llevo tiempo pensando y temiendo que llegara éste día.
La doctora me ha recomendado que haga una tarta como cada año y que brindemos a tu salud. Pero me temo que aunque me marque de nuevo ésta tarta Fraisier de chocolate que tanto te gustó, no nos sabrá igual.
Alguna gente con la que hablo, me dice que borre este día del calendario y piense en que es la creación de unos grandes almacenes. Pero simplemente no me parece la solución, intentar no pensar en ello no lo va a hacer desaparecer.
Mi corazón me dice que es el día de la madre, tu día, y mi cabeza que ya no te tengo a mi lado para celebrarlo.
Es un cúmulo de sentimientos, es un quiero y no puedo.
Quiero celebrarlo por que sería lo que a ti te gustaría, y no puedo por que tu ausencia se hará más notable.
Así que llevo tiempo divagando que hacer, y he decidido escribir éstas lineas, hacer que sean mi pequeño homenaje a ti hoy.
No paro de pensar en lo frágil que es la vida, en que hace un año nos reunimos en tu hogar, en tu jardín y lo disfrutamos a tope, sí, pensando que quizás nunca se podría llegar a repetir una situación como la de estar tres generaciones juntas, pero jamás imaginé que sería de esta manera.
Nunca pensé que la que me faltaras serías tu.
Para mi es un día difícil, pese a que nunca hemos celebrado éste día de manera especial, simplemente con un "Felicidades mamá", una comida en familia, y si cuadraba un regalín con el que te hacíamos feliz.
Pero éste año, y todos los que vengan de ahora en adelante por el resto de mis días; será diferente, será triste. Ya no estás a mi lado. Ya no puedo mirarte a los ojos, reírme, charlar durante horas, o incluso hablar contigo sin necesidad de abrir la boca... Y es que esa era nuestra destreza, nos conocíamos tan bien, teníamos una relación tan especial...
Me gusta pensar que voy a verte, no sé si hoy, mañana o en unos años, en alguna otra vida. Sólo me gusta pensar que voy a verte de algún modo, en algún lugar dónde nuestros destinos coincidan de nuevo. Sólo pienso en eso, me gusta pensar que voy a verte mamá. Me gusta pensar que podré volver a decirte que te quiero.
Hoy sólo me queda recordarte, pensar en la suerte que he tenido en poder pasar éste día contigo durante 23 años y darte las gracias por ser la mejor, por inculcarme tus valores y enseñarme tantísimas cosas. Darte las gracias por sentirte a mi lado cada vez que sale de mis entrañas ese carácter arrollador que heredé de ti, cada vez que hago alguna de tus expresiones, cada vez que te recuerdo. Gracias por seguir conmigo, protegiéndome aunque no te pueda ver.
¡Espero que os guste!
Feliz día de la madre, hoy y siempre.
(16 Porciones)
INGREDIENTES:
Para el almíbar:
- 200 ml de agua
- 200 g de azúcar
- 1 Cda de licor de cerezas
Para el bizcocho genovés de chocolate:
- 3 Cdas de mantequilla
- 1 Cdita de extracto de vainilla
- 80 g de harina
- 40 g de cacao en polvo
- 130 g de azúcar
- 4 Huevos L
- 1 Pizca de sal
Para la muselina de chocolate:
- 250 ml de leche entera
- 1 Vaina de vainilla
- 2 Yemas de huevos L
- 65 g de azúcar
- 20 g de maizena
- 70 g de chocolate negro
- 40 g de mantequilla en pomada
- 85 g de mantequilla
- 1 Cda de licor de cerezas
- 300 g de fresas
Para la ganachè de chocolate:
- 100 ml de nata
- 100 g de cobertura de chocolate
- 1 Cdita de mantequilla
Para la decoración:
- 1 Fresa
PREPARACIÓN:
Para el almíbar:
Disponemos el agua y al azúcar al fuego, una vez que el azúcar comience a disolverse, agregamos el licor de cerezas y mantenemos al fuego hasta que el azúcar se disuelva por completo.
Reservamos hasta que enfríe, y entonces lo disponemos en un biberón de cocina hasta su uso.
Para el bizcocho genovés de chocolate:
Disponemos la mantequilla en un cazo y derretimos a fuego suave para que no humee.
Una vez que la mantequilla esté totalmente disuelta, agregamos la esencia de vainilla y la mantenemos caliente.
Disponemos los huevos que deberán estar a temperatura ambiente en el bol del robot amasador, junto con el azúcar y la pizca de sal.
Con ayuda de la varilla de montar, trabajamos la mezcla de menor a máxima velocidad.
Trabajamos hasta que la mezcla triplique su volumen y la masa forme un dibujo que se mantenga al caer sobre la superficie.
Y los añadimos a la mezcla de los huevos.
Con ayuda de una espátula de cocina y haciendo movimientos envolventes, vamos mezclando hasta que no quede ningún grumo.
Entonces, agregamos la mantequilla con la esencia de vainilla y mezclamos.
Vertemos en un molde, en este caso de 22cm de diámetro, engrasado y enharinado, para que el desmoldado resulte fácil.
Metemos en el horno previamente calentado a 185ºC y horneamos durante 15 minutos aproximadamente, asegurándonos la cocción pinchando con un palo de metal.
Pasado éste tiempo, reservamos hasta que enfríe.
Para la muselina de chocolate:
Ponemos la leche con la vaina de vainilla en un cazo y dejamos que hierva.
Retiramos del fuego, sacamos la vaina, tapamos y dejamos que repose durante 30 minutos.
Troceamos el chocolate y lo disponemos en un bol junto con la mantequilla en pomada.
En el bol del robot amasador, disponemos las yemas de huevo, el azúcar y la maizena.
Batimos con las varillas de mezclar.
Entonces, agregamos la leche infusionada con la vainilla, mezclamos.
Pasamos la mezcla por un colador hacia el cazo de nuevo.
Mezclamos hasta que tengamos una crema homogénea y dejamos que enfríe a temperatura ambiente.
Cuando esté fría, levantamos la crema añadiendo 85g de mantequilla junto con el licor de cerezas.
Reservamos hasta su uso.
Para la ganachè de chocolate:
Disponemos la nata en un caso y llevamos a ebullición.
Entonces, sacamos del fuego y añadimos la cobertura de chocolate cortada en onzas.
Y con ayuda de unas varillas mezclamos.
Montaje y decoración:
Desmoldamos el bizcocho, que ya estará frío.
Como veis, al engrasar y enharinar el molde, se ha desmoldado perfectamente sin ocasionar ningún daño en la estructura del bizcocho.
Cortamos el bizcocho por la mitad, formando dos discos de éste.
Forramos el molde en el que habíamos hecho el bizcocho y vamos a montar nuestra tarta con papel film, y disponemos en él el primer disco de bizcocho.
Empapamos el bizcocho con aproximadamente la mitad del almíbar de licor de cerezas que habíamos hecho.
Bajo el grifo con agua fría, vamos lavando las fresas, les quitamos el tallo y partimos por la mitad.
Colocamos las mitades de las fresas sobre la muselina de chocolate, con la punta hacia arriba, y el corte hacia el borde del molde.
Una vez tengamos todo el borde, rellenamos el centro con más muselina.
Y sobre ésta, disponemos fresas enteras, con las puntas hacia arriba, hasta que rellenemos toda la superficie.
Terminamos de cubrir las fresas con el resto de la muselina.
Entonces tapamos con el otro disco de bizcocho.
Empapamos con el resto del almíbar de calar.
Presionamos con cuidado, dando un par de golpes suaves contra la encimera para asentar la preparación.
En éste momento, cubrimos con papel film la tapa de la tarta, y con un poco de peso sobre la tarta (en mi caso un par de platos) la llevamos a la nevera por unas 8 horas, aproximadamente.
Entonces retiramos la tarta de la nevera, la desmoldamos con cuidado y la ponemos en la blonda o el plato de presentación.
Vertemos sobre ella una pequeña cantidad de la ganaché de chocolate.
Y la extendemos hacia los bordes, sin que llegue a sobresalirse ni a desbordarse.
Sólo para que cubra la parte de arriba del segundo bizcocho.
Por último decoramos con una fresa cortada en varias láminas superpuestas unas encima de otras.
Éste es el resultado final de nuestra tarta fraisier de chocolate.
Aunque la foto no es de muy buena calidad, ya que es de móvil y con flash 🙈, no quería que os perdierais el espectacular corte de la tarta.
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Que orgullosa tiene que estar tu mami por estas palabras tan llenas de amor y agradecimiento hacia ella.Por ella tienes que celebrar este hoy y siempre,ella esta en ti en tus hermanos y en todo lo que os rodea,brindar por ella y por todo lo bueno que os deo en su corta vida,a ella le gustaria que sonrieseis al recordarla,aunque las lagrimas no nos dejen ver el sol hoy hace un dia espléndido.Un beso enorme para todos,pero muy especial para ti.Tqmmm
ResponderEliminarAy mi Mar, me tiemblan las piernas al leerte, gracias por todo, por el apoyo, por el ánimo, por darme consejos y tenerme la misma estima que le tenías a tu amiga del alma... Por tratarme como una tercera hija y yo sentirte como mi segunda madre.
EliminarPronto nos damos ese beso! Te quiero mucho!
Mi niña bonita, siempre estará a tu lado, en tus recuerdos, en tu día a día, porque así son las mamis... Ese corazón lleno de amor y recuerdos bonitos hacia ella, son el mejor regalo, ella te estará mirando desde donde esté y estará feliz de verte guardarla en tu corazón. Un beso enorme.
ResponderEliminarMuchísimas gracias Montse. Es un día difícil... Más difícil que de costumbre quiero decir, no nos hacemos a la idea de que ya no esté. La casa es enorme sin ella, por que ella lo llenaba todo con su positivismo, su alegría y su manera de ser.
EliminarSé que ella está conmigo pero lo daría todo por poder tocarla, por darle un beso y poder volver a oirla. Pero nos tenemos que conformar con sus recuerdos, la vida es así.
Gracias por tus palabras, eres un cielo. Un beso
Es un homenaje precioso y ten por seguro que esté donde esté tu madre velará por ti y estará orgullosa de todo lo que haces.
ResponderEliminarNormal que sea un día duro para ti, nunca se está preparado para perder a una madre, pero con 23 años parece demasiado pronto aunque como bien dices has tenido la suerte de disfrutarla 23 años.
¡Animo!
Muchísimas gracias Cuca.
EliminarEso es lo que me gusta pensar, y por eso intento ser lo más fuerte posible, por ella, por que no me dejaría estar triste, aunque hay días para todo, y éste es especialmente duro. Gracias, un beso
Hola guapa. Qué bonito post, y qué coraje y fuerza tienes. Tu madre estaría orgullosa. Lo de hacer la tarta cada año me parece una idea fantástica, en memoria suya. Este día tiene que ser un día para recordarla e intentar no estar triste, que seguro que a ella le gustaría verte alegre.
ResponderEliminarÁnimo guapa. Un abrazo grande.
Muchas gracias Kim, ha pasado muy poco tiempo desde que nos falta y por mucho que lo intentamos todos los días tienen algún "momento gris".
EliminarPero poco a poco vamos cambiando las lágrimas por sonrisas en su recuerdo.
Besos
Hola Andrea:
ResponderEliminarAcabo de descubrir tu blog, de pura casualidad, pero llevo un rato viendo recetas tuyas y me gustan mucho. Con esta entrada además me has tocado la fibra, no estamos preparados para estas pérdidas que llenan tanto nuestra vida ¿verdad?.
Un homenaje precioso, mi niña.
Besotes y nos seguimos viendo.
Bienvenida a mi pequeño rincón, antes que nada.
EliminarMuchas gracias por tus palabras, desde luego que no, y cuando faltan sientes que la mitad de tu ser se ha ido con el.
Un besote, espero que te encuentres a gusto por aquí.