INGREDIENTES:

Para el bizcocho:

• 85 g de mantequilla
• 85 g de azúcar
• 1 Huevo y una yema de huevo
• 85 g de harina
• 8 g de bicarbonato
• 8 g de levadura química
• C/s de extracto de vainilla
• C/s de sprinkles de colores

1. Comenzamos haciendo el bizcocho: Disponemos en el robot de cocina la mantequilla junto con el azúcar, mezclamos hasta que forme una pomada. 
2. Añadimos el huevo y la yema, la levadura y el bicarbonato, la esencia de vainilla y la harina. Mezclamos bien hasta obtener una mezcla lisa.
3. Añadimos los sprinkles de colores y manualmente los integramos en la masa. Vertemos la mezcla a partes iguales en los moldes que vayamos a usar (En este caso dos de layer cake de 15 cm de diámetro) y extendemos bien por toda la superficie, metemos en el horno precalentado a 170ºC durante 25 minutos.
4. Montamos la nata que debe estar bien fría, junto con el azúcar glass. Cuando esté lista añadimos los sprinkles y mezclamos manualmente. Reservamos en la nevera hasta su uso.
5. Pasado el tiempo, sacamos los bizcochos del horno y dejamos enfriar por completo antes de desmoldarlos. Con ayuda de un cuchillo cortamos a ras de molde los bizcochos para dejarlos rectos.
6. Comenzamos con el montaje de la tarta y cortamos cada tableta de kitkat a la mitad. Los disponemos alrededor de un molde ajustable dejando la parte del corte hacia abajo y colocamos un poquito de la nata reservada en cada uno de ellos que actúe como pegamento al bizcocho.
7. Colocamos en el centro y con la parte recortada hacia bajo el primer bizcocho. Bañamos con el almíbar. Añadimos 3/4 partes de la nata montada y alisamos.
8. Colocamos encima el otro trozo de bizcocho con la parte recortada hacia arriba, para que la superficie de la tarta quede lo más recta posible. Aplastamos con cuidado para que quede recta, bañamos con el almíbar y cubrimos con la nata sobrante teniendo especial cuidado en que solo tape el bizcocho, sin llegar a los kitkat.
9. Ajustamos bien el molde ajustable, y echamos por encima intentando que queden lo más curiosos posible, los lacasitos. Por último añadimos más sprinkles de colores que cubrirán los huecos que queden en la superficie.

• 300 g de harina normal
• 3 Cdas de AOVE
• 150 ml de agua
• 1 Cdita de sal
• 1 Cdita de azúcar

• 5 Rodajas de mozzarella
• 20 g de queso curado
• 1 Tomate maduro
• 2 Cdas de tomate frito casero
• 100 g de atún
• Especias y hierbas aromáticas: C/s de orégano, C/s de piri-piri

1. Para la masa estilo fino ponemos en un bol el azúcar, la sal el AOVE y el agua. Añadimos la harina y trabajamos con las manos hasta integrar todo y formar una masa homogénea.
2. Al no llevar levadura no necesita fermentación por lo que de inmediato podemos estirar la masa de la pizza, manualmente o con un rodillo. Disponemos la masa en la bandeja del horno con papel sulfurizado y con una cuchara incorporamos el tomate frito casero y extendemos, espolvoreamos orégano y cayena piri-piri al gusto.
3. Añadir el queso rallado y distribuir por toda la masa, al igual que las migas de atún y el tomate fresco previamente cortado en rodajas finas.
4. Meter en el horno previamente calentado a 200ºC y cocinamos durante 20 minutos aproximadamente hasta que la masa esté completamente hecha y los ingredientes dorados.

• 1 Trucha mediana
• 3 Dientes de ajo
• 1/2 Pimiento verde
• 1 Cda de pimentón agridulce
• 250 g de pan de hogaza del día anterior
• 1 Pastilla de caldo de pescado
• 1 Litro de agua
• AOVE
• Sal
• Especias y hierbas aromáticas: 1 hoja de laurel

1. Lo primero que vamos a hacer será cortar el pan del día anterior en láminas. Nosotros usamos pan de hogaza de horno de leña, que cortamos gordito porque a nosotros nos gustan las sopas bien espesas pero el tamaño depende de vuestro gusto.
2. En una cazuela con aceite doramos los ajos picados. Una vez empiecen a dorarse, ponemos la cebolla bien picada y el pimiento verde y pochamos.
3. Una vez que se hayan cocinado, agregamos la hoja de laurel y la pastilla de caldo de pescado. También el pimentón agridulce, que le aportará color y sabor.
4. Mezclamos y de inmediato, echamos el agua para romper el hervor y que el pimentón no se queme.
5. Dejamos que el caldo rompa a hervir, y entonces, agregamos la trucha, abierta y limpia, cortada a la mitad. Cocemos a fuego medio, manteniendo el hervor durante 10 minutos aproximadamente. Con ayuda de una espumadera, las sacamos y reservamos hasta su uso.
6. Subimos de nuevo el fuego y entonces, agregamos el pan en láminas. Con ayuda de la espumadera, las hundimos en el caldo para que se empapen bien y cocinamos a fuego bajo durante cinco minutos, intentando no remover demasiado para no romper las láminas de pan.
7. Pasado el tiempo, procedemos a emplatarlas en un plato o cazuela de barro que es la manera tradicional. Echamos un par de cazos por persona y finalizamos con una mitad de la trucha por encima.

• 1/2 Litro de leche entera
• 2 Cdas colmadas de harina
• 2 Cdas colmadas de maizena
• 5 Cdas de azúcar granillo
• 2 Yemas de huevo
• 1 Cda de mantequilla

1. En una cazuela antiadherente, que te asegure que la masa no se va a pegar; echar la mantequilla y a fuego suave para que no humee, dejar que se derrita.
2. En un bol mezclar todos los demás ingredientes removiendo hasta que todo esté completamente disuelto.
3. Incorporar la mezcla anterior en la cazuela con la mantequilla derretida, poner al fuego suave y espesar sin parar de remover para que no se pegue.
4. Cuando la masa haya espesado, retirar del fuego y con una lengua verter en un molde con el grosor deseado. Dejamos templar un par de minutos y cubrimos con papel film a piel para que no haga una corteza dura en la masa mientras reposa. Refrigeramos durante 12 h.
5. Pasado el tiempo, la masa habrá tomado la consistencia idónea para cortar los trozos con el tamaño deseado y que al sacarlos mantengan su forma. Cortamos rectángulos de 3 x 7 cm aprox. Pasamos cada pieza por harina, y después por huevo.
6. Freímos en aceite bien caliente las piezas, y en cuanto forme una pequeña costra por debajo, poner a fuego suave durante unos minutos hasta que tome un color dorado. Se les da la vuelta y se sigue el mismo proceso con todas las piezas. A medida que vayamos friendo, las sacamos a un plato con papel absorbente para que recoja toda la grasa sobrante. 
7. Recortamos los hilos del huevo de la fritura para que queden unas piezas más bonitas y emplatamos con un poquito de azúcar y canela por encima.